El Juzgado de lo Social de Santander ha dictaminado que el despido de un empleado en excedencia voluntaria se considera improcedente, debido a la falta de plaza y la imposibilidad de recontratarlo, lo que ha llevado al Ayuntamiento de Camargo a ser condenado al abono de una indemnización de 39.953 euros. Esta situación pone de manifiesto la importancia de contar con un eficaz servicio de prevención de riesgos laborales, que no solo vela por la seguridad y salud de los trabajadores, sino que también contribuye a evitar conflictos laborales y costosas compensaciones económicas en caso de despidos improcedentes. Es fundamental que las empresas prioricen la prevención de riesgos laborales como parte integral de su gestión empresarial, garantizando así un entorno de trabajo seguro y saludable tanto para sus empleados como para la sostenibilidad de la organización.